7 de octubre de 2009

CONFERENCIA EN SANTIAGO DEL ESTERO

El Sistema o Régimen de Dominación: Enemigo mortal de nuestra Patria

Son millones los Argentinos, que en medio de una tremenda oscuridad se preguntan que ha pasado con nuestro país. Por que ocurre lo que vemos todos los días, por que la maquinaria de destrucción avanza sin posibilidad que se atine a ponerle coto. El desgobierno, la venalidad pública, la entrega de nuestro patrimonio, la estafa electoral, la deconstrucción cultural, la pobreza la marginalidad, la contranatura y la lumpenización de enormes franjas de nuestra patria y de nuestros compatriotas.

¿Tiene esto causas visibles y palpables?

¿Como se forma este proceso de decadencia cada vez mas acelerado?

¿Podemos resistir a este proceso?

A estas preguntas trataremos de acercar someramente algunas respuestas de acuerdo a nuestro leal saber y entender y conforme lo que viene sosteniendo desde hace años en soledad y en medio de la incomprensión, la estigmatización o la crítica mal sana el Nacionalismo Argentino.

Muchos sostienen que en Argentina no existen políticas de Estado, que todo es improvisación y necesidades circunstanciales satisfechas de acuerdo a los pareceres y conveniencias de los gobernantes de turno.

Déjenme decirles que sostengo lo contrario, en Argentina hay políticas de Estado. Especialmente desde hace 30 años las mismas se desarrollan sistemáticamente y nos han conducido a lo que tenemos hoy. Ese conjunto de políticas seguido sistemáticamente vehiculizan lo que llamo Sistema o Régimen de Dominación que ha logrado anularnos como Nación y al mismo tiempo sumirnos en la ignorancia de cómo se ha llevado a cabo esa anulación. Su finalidad inmediata es mantenernos como una factoría o en caso de ser necesario disolvernos en el mar de la balcanización. Su finalidad mediata es contribuir al proceso de mundialización disolviendo de a poco y a largo plazo el poder de los Estados (en este caso el nuestro) en beneficio de la globalidad como se la llama ahora.

Para ello tienen como arma predilecta el universo cultural manejado por los “hombres de las palabras” como lo dice acertadamente el maestro D’angelo Rodríguez, que se convierten en los operadores del aparato de justificación de nuestra propia liquidación como sociedad organizada. Ellos van a predicar la conveniencia del caos sobre el orden, de la anarquía sobre la autoridad, de la inmoralidad sobre la decencia, de la locura sobre la cordura, entre otras cosas que me quedan en el tintero. Son los destructores del sentido común y los enemigos del Orden Natural, ridiculizadores de la religión, estigmatizadores del patriotismo y destructores de la familia

Esas políticas de Estado mencionadas han sido ideadas, manejadas e implementadas desde el extranjero, aprovechando una extrema debilidad y un labil espíritu patriótico de los argentinos, el que se ha acentuado desde 1983, con la facilidad que han encontrado luego de la derrota de Malvinas y como reaseguro para que este tipo de rebeldías jamás volviera a darse. Este es justamente un fenómeno que se va retroalimentando En tanto mas se avanza en esas políticas, mas se va minando el espíritu de los argentinos y menos resistencia se va encontrando. Es el perfecto sistema de ablandamiento general que finalmente produce la entrega incondicional. El sistema o Régimen de Dominación es instrumento de una guerra contra la Nación, una guerra principalmente psicopolitica, pero con otros elementos que le son particulares.

Es justamente un paquete, un conjunto de factores. Una maquinaria que vive a expensas de la Nación y sus habitantes. Ese paquete tiene distintas vertientes pero obedece a la misma finalidad, minar el espíritu nacional, mantenernos bajo control, mantenernos disueltos, enervar todo tipo de resistencia real, al mismo tiempo que se succionan nuestras riquezas sea por vía de la deuda externa, por vía de la venta a precio vil de nuestro patrimonio territorial o empresario cuando no directamente del robo descarado que ejecuta la banda que tiene como tarea implementar esas políticas desde el Estado a favor del Imperio.

Describamos someramente las diferentes vertientes que en definitiva obedecen a una misma finalidad y actúan conjuntamente sobre el cuerpo de la Nación y de nuestra sociedad alienada y confundida por el mismo aparato de propaganda y de cultura del enemigo.


Matriz Filosófica


Es evidente que lo que llamamos Régimen o Sistema de Dominación es una construcción, hoy en día de índole mundial, que tiene una filosofía subyacente determinada, un origen filosófico que esta en los valores de la modernidad, oriundos de la ilustración, tal como quedan reflejados, por ejemplo, en la constitución americana, que habla de algo así como del derecho a la “búsqueda de la felicidad“ y planteamientos individualistas similares que acuñan la conciencia del ciudadano occidental contemporáneo.

La meta última de esta filosofía es el igualitarismo sin jerarquías y el bienestar material en un universo social optimista, pacificado y apolítico. Este grupo incluye a todos los movimientos e ideologías actuales, excepción hecha del nacionalismo. Abarca el liberalismo, el anarquismo, el comunismo y la socialdemocracia.

El suyo es pues el mundo que todos conocemos, excepto en el caso anarquista, cuya utopía, más allá de algunos conatos, harto sanguinarios por cierto, durante la guerra civil española o en lo que hemos denominado subcultura de la trasgresión lumpen, nunca ha llegado a controlar, a diferencia del marxismo, el liberalismo o la socialdemocracia, las instituciones contemporáneas.

Pero digamos para ser justos que es el liberalismo filosófico el motor que propulsa al sistema, el origen del mismo en una versión radical y excluyente, una suerte de jacobinismo redivivo.

Lo hemos apreciado de forma más que evidente en la actuación política de sus ejecutores y mandatarios.

Esto queda a la vista de una forma bastante particular en nuestra nación y desnuda al mismo tiempo la identificación en raíces ya citadas, puesto que los máximos implementadores de dicho extremismo revolucionario de raíz liberal, son los que hace 30 años se decían antiliberales y partidarios del marxismo castrista. Los que se conocen hoy como progresistas y que ayer eran castristas, comunistas, marxistas leninistas o como quiera llamarselos.

Es que filosóficamente hay una identidad en los ideales del marxismo como del liberalismo. Los valores que defienden son los mismos. La misma raíz inmanentista y antitradicional los identifica. El mismo antropocentrismo, el mismo internacionalismo o mundialismo e igual rechazo a Dios, especialmente a cualquier religión que hable de un Dios trascendente y más aun a la Iglesia Católica. La visión teológica moderna va desde el deísmo sin dogmas al ateismo práctico y militante o directamente al antiteismo, como apreciamos muchas veces.

Esa identificación en los “valores” que sustentan ambas ideologías de la modernidad explican claramente su episódica alianza durante la Segunda Guerra Mundial y ponen en claro el por que de su convivencia actual como elemento fundamental del Sistema o Régimen de Dominación tanto a nivel mundial como local. Lo que conocemos como Nuevo Orden Mundial

En la actualidad y para resumir diremos que este sistema se identifica con la filosofía materialista, inmanentista, hedonista, individualista y relativista. y que en lo teológico varia desde el agnosticismo hasta el ateísmo. Siendo especialmente anticatólica.

La adscripción a esta tendencia filosófica tendrá consecuencias en la práctica, en la política, en la economía y en la cultura. Las que se harán patentes especialmente luego de 1989 con la disolución de la URSS y la inauguración con ello del mundo unipolar.

Esto lo prefigura el Padre Meinviella en su libro “Los Tres Pueblos Bíblicos en su lucha por la dominación del mundo”

Protestantismo, Liberalismo, Comunismo: He ahí las tres grandes e irreductibles revoluciones de un mundo descristianizado, revoluciones todas ellas arrastradas por la lógica de un proceso dialéctico inflexible; revoluciones también que, mirando las cosas desde otro punto de vista, en atención a la causa eficiente que las dirige, no son sino el camino concreto para someter a la dominación judía los pueblos cristianos”

En efecto antes de la disolución del mundo comunista el sistema tenía unidad en lo filosófico pero discrepancia en lo ideológico y político de allí la denominada Guerra Fría.

Desaparecida la lucha política, la convivencia entre ambas tendencia integradas a un sistema único se da en el ideario contemporáneo manifestándose en tres vertientes, que justamente se implementan aquí en base a esas puntuales políticas de Estado que he mencionado al principio de la conferencia y que hace treinta años actúan sobre el cuerpo de la Nación produciendo las manifestaciones que podemos hoy apreciar con solo leer los diarios

De esta forma podemos identificar a esas tres vertientes del Sistema o Régimen de Dominación a grandes rasgos como Política, Económica y Cultural.


Vertiente Política. La democracia de masas


Finalizada la guerra fría tanto el comunismo (edulcorado y maquillado de progresista) como el capitalismo se integran en un solo sistema donde se reparten roles diferentes unificados por la figura universal y cuasi mítica o religiosa de la Democracia.

Lo curioso es que el capitalismo se radicaliza en sus aplicaciones económicas y el marxismo se trata de atenuar en sus características más opresivas e incluso sanguinarias.

Para el vulgo, para los forjadores de imagen, para los “hombres de las palabras” que ya mencionamos antes, pasan a ser dos caras contrapuestas, el progresismo será la cara de la justicia, de la comprensión para los marginados y para los marginales, el espíritu de apertura. El capitalismo representara la eficiencia, el espíritu de la laboriosidad, el lucro y la organización. Todos sabemos que dicha contraposición no es tal, sino que hay una integración de ambos en el sistema y un camuflaje dialéctico que en la realidad solo es un montaje. Dentro del sistema no hay dos paradigmas diferentes, sino una división de roles. El supuesto enfrentamiento no es tal. La dialéctica izquierda derecha es algo inducido. Capitalismo y progresismo no son modelos contrapuestos sino complementarios. Hoy esta dialéctica falsa confunde sobremanera a los argentinos, es un círculo vicioso del que parecen no poder salir.

Hemos hablado de la unificación de las dos tendencias político -ideológico después del fin de la guerra fría y la disolución del comunismo como forma de estado.

Podemos decir que localmente el esqueleto político de este nuevo modelo ya estaba armado desde 1853. En efecto Lo que sucedería localmente seria consecuencia, también del proceso de la modernidad y su filosofía, Un proceso de ruptura con nuestra tradiciones y nuestra forma de pensar la realidad y el mundo, mantenida durante mas de 3 siglos hispánicos, y media centúria de vida independiente, iniciado efectivamente con la Constitución de 1853 y forjado por la generación liberal y masónica triunfante en Caseros, sin ese inicio todo lo que sobrevino hubiera sido imposible. Como lo enseñara Alberdi- en sintonía con lo detallado en el párrafo anterior- La Constitución tenía como finalidad la ruptura y el desprendimiento del pasado histórico. Al mismo tiempo las elucubraciones de este pensador tan valorado últimamente, seria elemento teórico de una limpieza étnica que terminaría con el arquetipo del hombre argentino. El gaucho, el mancebo de la tierra nacido de la fecunda unión entre lo hispánico y lo indígena. Es la génesis de nuestra democracia.

Esa democracia se constituirá en factor de articulación del sistema mediante un andamiaje jurídico por un lado y al mismo tiempo en dogma de fe que hermanará a ambas vertientes. Lo intocable, lo intangible, lo único impoluto en cuyo nombre se doblan todas las rodillas. Lo que se da en llamar la democracia como estilo de vida y digámoslo claramente como religión. Se puede discutir todo desde como tapar baches en las calles a la Divinidad de Cristo, pero no se puede poner en duda el sistema democrático de gobierno. Es el tabú del régimen de dominación.

En nuestro país, políticamente y con las características que observamos en la actualidad, este régimen se inaugura formalmente en 1983. La Democracia de masas, salida de las sentinas de la “Task Force” británica, luego de la derrota de Malvinas y administrada por el “Partido de los Derechos Humanos”, cualquiera fuera su designación de fantasía (Radicalismo o Peronismo de diferentes variantes), con la bandera del Holocausto Argentino (30.000 desaparecidos) desplegada al máximo.

Era este para nosotros, el primer acto político del Régimen o Sistema de Dominación en nuestra tierra, era saludado con alborozo por millones de ciudadanos que ni imaginaban el desastre que seria luego de casi tres décadas de funcionamiento irrestricto.

Es que la democracia entendida con el espíritu de 83 nada tiene que ver con la democracia clásica, nada con la democracia orgánica. Es en realidad lo que modernamente se denomina democracia de masas como ya hemos dicho. El reinado de los medios de comunicación y de los “hombres de las palabras”, el reinado del relativismo, donde todas las opiniones igualmente son validas, donde la verdad no existe o es inasequible al hombre. El reinado de la volunta general. Una voluntad general manipulada en base a campañas de propaganda. El reinado del hombre autónomo, que puede pronunciarse y decidir sobre todo lo que se le pregunte Un hombre un voto será su bandera, desconociendo la representación política de las entidades colectivas nacidas del orden natural, sustituidas por los partidos políticos. Entes contranatura que hoy se encuentran en estado de disolución permanente poblados por una mafia de arribistas y expertos en nada o en enriquecerse ilícitamente.

Democracia que para que siga teniendo apariencia de tal debe sustentarse a como de lugar especialmente con el fraude o la burla permanente de sus propias normas como ocurre con la constitución Nacional. Convertida hoy en día en una ficción en la que nadie cree. Habla a las claras de ello el absoluto desprecio o indiferencia que produce en la ciudadanía. que se niega en casi la tercera parte del electorado a participar en sus periódicas farsas electorales, no yendo a votar o directamente no concurriendo a cubrir los cargos durante la votación.

Ese es el andamiaje político, la vertiente política del sistema o régimen de dominación la democracia de masas inorgánica nacida del principio de la soberanía popular.

Vertiente Económica. El Capitalismo global

Contrariamente a la vertiente política y cultural esta vertiente se inaugura en 1976, cuando el gobierno del Proceso de Reorganización Nacional adscribe a la división internacional del trabajo que establece el denominado Poder Internacional del Dinero.

La reestructuración del capitalismo mundial luego de la crisis del petróleo de principios de los 70 llega a nuestras costas de la mano de Martinez de Hoz y Videla. Con ellos se inicia la etapa actual de dependencia económica de nuestra sufrida Argentina por vía de la política del endeudamiento permanente con las entidades crediticias internacionales. Se revierte también el incipiente desarrollo capitalista independiente iniciado en la década del 50 y 60 y motejado por los nuevos dueños de la economía como ineficiente. Comienza la era de las quiebras de las empresas nacionales o su compra por precio vil por parte de empresas multinacionales.

Según algunos afirman, los militares trataban de desarrollar el país para alejarlos del denominado peligro comunista. Recordemos que estábamos en plena guerra revolucionaria contra el castrismo. Particularmente creo que quienes subieron al gobierno no lo hubieran hecho, si antes no hubieran aceptado a libro cerrado, como imposición del poder mundial, esta política capitalista liberal monetarista, de la escuela de Chicago. Algunos cándidamente habrán pensado que le hacían un servicio a la nación rescatándola de las garras del marxismo por vía de este tipo de políticas económicas. Los que las ejecutaban sabían bien a donde conducía dicho camino, sino tendríamos que pensar que eran todos infradotados.

Pero nos hemos referido al Poder Internacional del Dinero como inspirador y director de la vertiente económica del sistema o régimen de dominación veamos a que nos referimos

Este modelo del Imperialismo Internacional del Dinero, de la usura mundial, es conducido por banqueros, que se ha levantado por encima de la soberanía de las Naciones a través de estos últimos cinco siglos manejando o apoyando el proceso de ruptura y degradación nacido con la Reforma y el Libre Examen, en su faceta actual favorece evidentemente y a largo plazo a la instalación de un gobierno mundial. Es un hecho comprobado que aquellos que representan ese poder monstruoso son una elite conformada por alrededor de 300 familias de banqueros o empresarios estrechamente vinculados a la banca, la mayoría de los cuales son de origen judío. Esto último también es un hecho, por lo tanto si fueran negros, esquimales o arios también lo diríamos y lo puntualizaríamos como lo que es: un hecho notorio. Según Bochaca, en su conocido libro Finanzas y Poder. El Poder Internacional del Dinero esta conformado por unas 300 familias dueñas de empresas y bancos que manejan la economía a nivel mundial. Asentadas mayoritariamente en los países centrales, ejercen su dominio a trabes de sus terminales instaladas a lo largo y ancho del universo mundo, por lo general empresas conectadas o dependientes de emporios bancarios que se han forjado en base al préstamo a interés compuesto núcleo este de la usura. Ni siquiera es necesario que mencione a familias como Rokefeller, Rostchild, Dreifus, Morgan

:El sistema que hoy domina nuestra patria es tributario del denominado Imperialismo Internacional del Dinero Podría decirse que somos una colonia pero mas exacto seria decir una factoría. Tendríamos que especificar que este es el núcleo central y razón de ser de nuestra condición de país dependiente y al mismo tiempo la razón de ser de la existencia del sistema que nos oprime: el dinero.

Pero sería el Papa Pío XI en la profética encíclica “Quadragesimo Anno”, que en 1931 visualizara la importancia que tenia ya en aquel entonces esta entidad, que, actualmente como verdadera metástasis se ha extendido por todo el globo. Justamente recién hoy en día y bajo el nombre inocuo de globalización, por la que los bienpensantes se babean, tenemos a la vista la acción y los frutos de aquello que el Papa describiera hace más de siete décadas.

Con el correr del tiempo la condena en referencia a dicho monstruoso poder continuaría con las encíclicas “Mater et Magistra” de Juan XXIII, allí se habla del servilismo de los poderes públicos a intereses de grupos, condenando seguidamente al “Imperialismo Internacional del Dinero” y “Populorum Progressio” de Pablo VI que condena al liberalismo sin freno que conduce a la dictadura del mercado, haciendo hincapié que dicho sistema ya ha sido denunciado por PioXI como el “Imperialismo Internacional del Dinero”. Estas encíclicas fustigan con dureza la creencia liberal que afirma la propiedad privada como un derecho absoluto Esta concordante doctrina de los Papas, no ha tenido continuidad actualmente y hoy desde las mas altas esferas de la Iglesia se toma a la globalización como un fenómeno inocuo.

Podemos caracterizar ese poder internacionalizado desde una perspectiva geopolítica y estratégica como lo hace el Tte. Cnel Alonso:

1.- Desnacionalizado se ejerce a escala global y si bien opera mayoritariamente desde los países centrales, no se identifica con ningún Estado o poder nacional especifico. Se trata de una elite financiera mundial y de empresas transnacionales funcionando como una red. Es un poder sin territorio, población, fuerzas armadas, jurisdicción judicial etc.

2.- Oligárquico Plutocrático: su esencia radica en la extraordinaria concentración de riquezas y dinero en pocas manos. Su origen y naturaleza es distinta al de las naciones y ajena a los elementos constitutivos de un Estado cualquiera.

3.- Parásito: Su asentamiento físico siempre esta dado por los lugares donde puede obtener facilidades para lucrar y donde obtenga mas seguridad para sus operaciones tanto sean locales como internacionales. Actualmente se asienta en los países denominados centrales o sea EE. UU y las naciones de Europa Occidental, donde se asienta también lo mas concentrado de la judería en la diáspora.

4.- Privado. Se trata de una entidad privada supranacional, que emerge a la arena política mundial mediante Estados (EEUU por ejemplo) que cumplen el rol de meros instrumentos para la penetración en otros a los efectos de la obtención de riquezas mayores y como medio, muchas veces militar, para terminar con episodios de resistencia que se opongan a sus designios.

5.- Político: Se trata de un poder político ejercido también de forma supranacional. Ese poder trata que el concierto mundial de las naciones en su conjunto se asemeje lo mas posible a él y facilite al mismo tiempo el crecimiento exponencial de sus riqueza mediante el control de gran parte del comercio mundial, de las instituciones internacionales de crédito, la emisión de moneda de pago internacional (dólar), así como gran parte de las acreencias de las deudas externas de los países (prácticamente no hay países sin deuda). De allí será favorable a un gobierno mundial controlado por ellos o sus mandantes, sean estas personas o Estados (6)

Los mismos mentores y teóricos de la Globalización describirían los objetivos del Imperialismo Internacional del Dinero. Así Carroll Quingley nos dirá en su libro Tragedia y Esperanza, verdadera Biblia del poder mundial:

"El poder del Capitalismo financiero, tiene un objetivo trascendental, nada menos que crear un sistema de control financiero mundial en manos privadas, capas de dominar el sistema político de cada país y la economía como un todo"

Creo que no es necesario que diga mucho más sobre la verdadera cara del enemigo. Ni es necesario que mencione tampoco donde se asienta y que estados lo ayudan en su tarea por la dominación mundial

La Vertiente Cultural: El Progresismo

Ya hemos adelantado algo de esto cuando hablamos de los operadores de esta vertiente, de los hombres de las palabras y su influencia en el medio ambiente en que el hombre se desenvuelve hoy en día, el trabajo que estos operadores realizan sobre las creencias de la gente, actuando sobre un conjuntos de factores que en definitiva tienden a la modificación de conductas y opiniones para finalmente modificar lo que se denomina sentido común. Es justamente, esa forma de pensar de discernir y determinar en definitiva lo que esta bien y lo que esta mal, lo que es beneficioso y lo que no lo es, lo que debe ser aceptado o rechazado de plano. Esa es la materia con que trabaja el progresismo o marxismo cultural. Curiosamente dice la enciclopedia wikipedia, fuente de nuestra ciber cultura que

Progresismo y progresista son términos ideológicos de aplicación genérica, que agrupa posiciones políticas, doctrinas filosóficas, éticas y económicas identificables de un modo amplio con lo que se denomina izquierda, entendida como los principios ilustrados en los que se basó la Revolución Francesa de 1789: Liberté, égalité, fraternité (libertad, igualdad y fraternidad) Luego afirma cándidamente

El progresismo actual defiende nuevos tipos de libertades como las ligadas a la identidad sexual (feminismo, derechos de los homosexuales), el aborto, la defensa de la tierra (ecologismo), derechos de los animales; y otras tradicionales, como el laicismo. Es tolerante con la diversidad religiosa y la inmigración (multiculturalismo). Muy a menudo se identifica con la denominada corrección política.

Pero lo que parece olvidar casualmente es lo ocurrido con posterioridad históricamente a lo que reseña y que da nacimiento al moderno progresismo, especialmente cono consecuencia del fracaso del marxismo en esparcir la revolución a Europa Occidental a principios del siglo XX, Hecho este que daría luz al Gramcismo y a la escuela de Frankfurt. Dos de las escuelas de la que actualmente es tributario el pensamiento progresista.

Será justamente Max Horkheimer, teórico de Frankfurt, quien realizará un replanteo de las tesis marxista según las cuales la superestructura (cultura) es una consecuencia de la infraestructura económica. De allí la denominada Teoría Crítica. Max Horkheimer afirma que la manera de destruir la civilización tradicional es el ataque sistemático a todos sus valores, no la formulación teórica de una sociedad alternativa como lo hacen diversas corrientes del marxismo clásico. Ejemplo. Valor: El matrimonio es la unión de un hombre y una mujer con el objetivo de formar una familia, tener hijos y transmitirles los valores de sus antepasados. Crítica: El matrimonio puede ser cualquier tipo de unión donde intervenga el apetito sexual sin ningún fin concreto o con el solo fin del placer animal. Resultado: Instauración del matrimonio homosexual verbigracia.

De allí que la finalidad del marxismo cultural en un principio es minar las bases y la cultura de la sociedad tradicional. Sugestivamente, durante la etapa del nazismo la Escuela de Frankfurt es cerrada y sus principales teóricos se trasladan nada menos que a los Estado Unidos, donde comienzan una meteórica carrera en las universidades más importantes de aquella nación. Asi lo harían Horkheimer, Adorno, y sobre todo Herbert Marcuse. Al mismo tiempo se convierten en becarios de las fundaciones libres de impuestos norteamericanas de estrecha relación con los capitostes del Poder Internacional del Dinero como el caso de la Fundación Rockefeller, comenzando a trabajar en investigaciones sociales para estos entes. Marcuse seria además del gurú de la contracultura de los 60 asesor del departamento de Estado norteamericano para cuestiones relativas a la URSS.

De allí estos personajes, financiados por las mencionadas fundaciones y cubiertos de triunfos académicos, serian los teóricos de la reforma de la sociedad americana de post guerra. La disolución de la cultura tradicional en clave progresista, la disgregación de la familia, la difusión de las drogas y la revolución sexual y hasta la cultura del rock tienen relación con este fenómeno.

Ya dijimos que el marxismo de Frankfurt no se plantea el tema de la toma del poder, sino que se limita a destruir y disolver la cultura tradicional. La deconstruccion y crítica de la autoridad, del patriotismo, de la laboriosidad y fundamentalmente de lo religioso le son comunes. La dislocación social y el caos son las consecuencias de esto. De allí el carácter anárquico actual de importantes estratos de la sociedad norteamericana

Preguntémonos entonces por que las fundaciones norteamericanas emparentadas al poder internacional del dinero financiaron en el pasado y aun hoy financian este modelo cultural. Por que hoy en día, las políticas de estado que mencioné al principio son financiadas por fundaciones como la Rockefeller y la Ford especialmente interesadas en la destrucción de la familia, en el crimen del aborto y el control natal o las políticas de derechos humanos que nos han sumido en la indefensión y la inseguridad. Es su finalidad disolver y confundir, evitar la resistencia, mientras se explota de forma inmisericorde y se succiona nuestros recursos por diferentes vías. Eso es lo que importa.

Disueltos no podemos resistir. Es más, confundidos ni siquiera nos damos cuenta quien es el enemigo. Algunos hablan aun del comunismo guiándose por apariencias, por el discurso y la verborrea insoportable de los ladrones que se turnan en el gobierno, o como reflejo tardío de la guerra fría, como si el comunismo tuviera alguna virtualidad. Los países que tienen hoy un sistema comunista son marginales y carecen de importancia en el concierto de las naciones. Las potencias comunistas de antaño han desarrollado economías capitalistas gracias a los capitales aportados por la banca internacional a las que se encuentran atados dichas naciones

Los que sostienen esto no se dan cuenta ( o no quieren darse) de quienes están detrás de la cultura izquierdizada aunque los tienen en la punta de las narices.

El capitalismo global con sede en los países centrales especialmente Inglaterra y EEUU financian nuestra disolución aplicándonos el cóctel que estoy reseñando. Dejemos de soñar con cosas del pasado. Hoy es un imperialismo silencioso, basado en la economía y la reingeniería social y el cambio cultural al servicio de la economía. Pero cuando las naciones resisten a sus designios, no descartan masacrar pueblos enteros sin escrúpulo alguno.

Perdimos una guerra contra ellos y a pesar que nosotros alegremente la echamos al olvido, ellos veteranos de mil entreveros y pillajes, jamás van a olvidar que un país subdesarrollado les mando toneladas de acero al fondo del mar. Jamás van a volver a confiar en nosotros y es bueno para ellos que no lo hagan. La cultura progresista sirve de justificación para nuestra anulación como Nación Soberana, como consecuencia de una guerra perdida. Este es nuestro Versalles.

Llama poderosamente la atención que todas las FFAA de los países latinoamericanos hicieron lo mismo con referencia a la represión del marxismo (violar garantías individuales), pero solo Argentina, que peleó una guerra contra Gran Bretaña y EEUU carece prácticamente de aparato de defensa, deconstruido en base al mito de los 30.000 desaparecidos. Son las fundaciones Rockefeller y Ford las que financian entre otros entes, el nefasto museo de la memoria que estigmatiza como genocidas a las FFAA. Son los que promueven la cultura progresive

Llama poderosamente la atención que se fogonee la denatalidad y el aborto desde el mismo Estado con el apoyo monetario de las mencionadas fundaciones como la Rockefeller, Bouffet o Gates, cuando tenemos un país vacío y con baja natalidad. Quieren espacios vacíos y mantener recursos de reserva, al mismo tiempo que evitar nuestro desarrollo cuyo paso uno es tener mercado de consumo y de trabajo o sea población. La política antinatalista es política de estado de EEUU desde la década de los 70. Recuerden el Memorando 200 de Kissinger

Llama poderosamente la atención que cuando el narcotráfico “es una fiesta” en nuestro país, la corte suprema de justicia orientada por personajes del CELS, bien financiado por fundaciones como Ford y Keloggs o magnates como Soros y el estado británico, libere el consumo personal de drogas.

Llama poderosamente la atención que cuando la delincuencia se encuentra en su apogeo y mientras se cuentan los cadáveres que deja todos los días. se sigua designando a funcionarios y jueces partidarios del abolicionismo penal, muchas veces becarios de las fundaciones ya mencionadas. Con cada designación de estas lo que avanza es el caos social y la destrucción de la autoridad

Llama la atención que pese a la destrucción de la educación se eche todavía manos a los planes de la FLACSO financiada También por una miríada de fundaciones entre las que se cuentan la Ford y Rockefeller entre otras. Esos planes han formado dos generaciones de jóvenes que no pueden ni comprender textos comunes.

Conclusión

Para que seguir, creo que la cosa es bien clara. Si no se entiende la interacción entre democracia de masas, poder financiero y cultura izquierdizada o progresista francamente no se entiende nada de lo que pasa aquí y de a quien beneficia lo que ocurre. Posiblemente se tenga tambien una visión absolutamente errada de lo que acaece en el mundo. Esos tres términos son las patas en las que se asienta el sistema de dominación. Son las tres caras del mismo

La ecuación es:

Engañar haciendo creer al vulgo que gobierna y decide, al mismo tiempo tener un aparato de justificación en base a la impoluta diosa democracia. Confundir y disolver para mantenernos pocos, inermes, inseguros, ignorantes e imbecilizados (drogas, alcohol, cultura de la diversión y la joda) cosa que no podamos organizarnos y resistir. Para ello el progresismo

Expoliar y vaciarnos de nuestras riquezas, por vía de diferentes canales como la deuda externa, el vaciamiento de las empresas del Estado en el pasado y la compra por monedas de nuestro territorio vacante.

Las finalidades que tiene el régimen de dominación internacionalmente y en lo mediato es la disolución de los Estados en beneficio de un gobierno mundial. La homogenización cultural e incluso racial por mestizaje. La globalización política, cultural y de los mercados, entre ellos el nuestro. Imponer una dominación absoluta política, económica y cultural

Es bueno que lo vayamos sabiendo, debemos comprender antes de actuar, para eso estamos aquí, si uno previamente a la acción no entiende el fenómeno que va a combatir esta derrotado o termina convirtiéndose en una pieza marginal del mismo.

Todo empieza por la inteligencia, incluso la resistencia que debemos ejercer a como de lugar. Pero hay que entender por que si entendemos el curso de acción posterior va a ser más fácil. Este es un comienzo.

Muchas Gracias


GUILLERMO ROJAS

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